Cri Cri Toy
un poco de historia
Francisco Gabilondo Soler Cri-Crí tuvo en su abuela, Emilia Fernández, a la musa de sus canciones: con ella no sólo escuchó los primeros cuentos musicales, acurrucado en su regazo, sino que su casa le sirvió de inspiración para que compusiera, entre otras, "La Muñeca Fea", "Chong Ki Fu" y "El Chorrito".En Orizaba, Veracruz, según costumbre de la época, las abuelas se ocupaban de los nietos. Y en el caso de Gabilondo, la separación de sus padres, cuando él era apenas un niño, obligó a que esa relación se fortaleciera."Cuando mi bisabuela (mamá de Cri Crí) se separó de su esposo, fue un gran escándalo. Era 1917 y uno se puede imaginar lo que pasó. Entonces su mamá se vino a la Ciudad de México y él, que tenía 12 años, se quedó en Orizaba."De ahí que tenga recuerdos muy fuertes de esos años que lo impactarían, mismos que ocupó años después para hacer lo que hizo", recuerda Óscar Gabilondo, nieto de "El Grillito Cantor".La relación entre ambos fue tan fuerte que ya siendo adulto, Francisco recurrió a los recuerdos de infancia para escribir una buena parte de sus canciones."Mi tatarabuela fue una parte vital en su vida, fue su musa. Seguramente en algunas ocasiones, para tenerlo tranquilo, ya que era muy inquieto, le bailaba algunas de las historia que contaba", dice Óscar Gabilondo.En la casa de la abuela de Cri Crí, existía una fuente con un problema que ocasionaba "El Chorrito" cada vez que alguien bombeaba para sacar agua de su interior, y que mojaba el camino por el que pasaban las hormigas, según recuerda el nieto del famoso compositor.Y en un librero se encontraba un jarrón que tenía "un chinito en las garras de un dragón", de donde salió la letra de "Chong Ki Fu".Por supuesto, también había un ropero de la abuela, que daría el título a una de sus más emotivas composiciones, y en cuyo interior se encontraba la espada de su abuelo, el coronel José Antonio Soler del Mazo.Eso sin contar a una muñeca de nombre Mía, que era muy preciada por las niñas de la zona, pero que con el tiempo fue abandonada en un rincón.Ahí, en casa de su mamá sustituta, también el niño vio por vez primera un piano, instrumento que en su madurez ocuparía para musicalizar las letras que surgían de su mente.Por las mañana, Gabilondo Soler y su abuela caminaban a un establo cercano para traer leche fresca."Le decía que la acompañara con Doña Robustina, como se llamaba una vaca, para comprarla. La historia se puede escuchar en La Lecherita", comenta, Óscar Gabilondo.Y en ocasiones, ambos viajaban al Puerto de Veracruz, lugar en el que se inspiró para "Negrita Cucurumbé" y "Cleta Domingo".Francisco Gabilondo Soler se encontraba ya viviendo en la capital del País cuando se enteró de la muerte de su abuela en la ciudad veracruzana, de la que se tiene poca información. Jamás platicó sobre sus sentimientos acerca de eso.
Infancia
Hijo de Tiburcio Gabilondo y de Emilia Soler, Francisco Gabilondo Soler se crio hasta 1928 en su ciudad natal Orizaba, siendo esta ciudad típica de montaña, entre cerros, lluvia, bosques y manantiales. Creció muy alto y era aficionado a aprender; así aprendió todo lo que pudo, especialmente geografía, matemática, astronomía, cuentos y música. Estos dos últimos los aprendió mejor, de modo que los combinó en distintos tamaños y formas. Tanto se dedicó a eso que acabó trabajando de compositor. La escuela lo aburría por lo que solo cursó hasta el sexto grado de educación básica. Le gustaba leer las obras de Hans Christian Andersen, de Hauff, de Julio Verne y de Emilio Salgari.
Juventud
Desempeñó diferentes actividades durante su adolescencia y juventud, entre ellos probó la natación, después el boxeo y por último, también intenta torear y aunque no lo hacía mal, le molestaba tener que matar el toro por lo que abandonó al poco tiempo esta afición, porque no se sentía a gusto con el trato que se le daba a los animales. Decepcionado por esta y otras razones dentro del arte de la tauromaquia, comenzó a probar suerte como músico y compositor. Inició su carrera como compositor a finales de los años veinte, cuando aún vivía en su natal Orizaba. Compuso ritmos como tango, fox-trot y danzón, aunque desafortunadamente sus primeras obras se perdieron.
Llegó a la ciudad de México en 1928 en busca de cumplir su sueño de estudiar Ingresó en al Observatorio Nacional como voluntario, pero lo dejó al poco tiempo por falta de recursos.
La llegada a la radio
En 1932 incursiona en la estación de radio XYZ con un programa humorístico y de crítica social, por el cual ganó el apodo de El Guasón del Teclado. Posteriormente el Sr. Othón Vélez le da la oportunidad de presentar canciones para niños. El 15 de octubre de 1934 inicia un nuevo programa de 15 minutos -sin patrocinadores ni publicidad- en la XEW en el que narraba historias sobre animales y otros personajes. A sugerencia del mismo Sr. Vélez, adoptó el nombre de Cri-Cri, El Grillito Cantor. Las canciones que interpretó durante esa primera emisión fueron El Chorrito, Batallón de Plomo, Bombón I y El Ropero. El programa se mantuvo al aire durante 27 años, siendo su última emisión el 30 de julio de 1961.
El Cine
En 1963 se estrenó una película titulada Cri Cri el grillito cantor protagonizada por Ignacio López Tarso y Marga López, sobre la vida de Francisco Gabilondo desde pequeño cuando vivía con su abuela hasta sus últimos años en los que ya no hacía su programa. En la película se interpretan diversas canciones escritas por él y también incluye una secuencia animada por Walt Disney para la canción de Los Cochinitos Dormilones.
Homenaje a un grande
Antes de su fallecimiento participó en un concierto conmemorativo con Eugenia León, donde cantó "Bombón I", "El ropero" y "La merienda". Las canciones de Gabilondo también fueron grabadas por el cantante de ópera Plácido Domingo, Emmanuel y la cantante francesa Mireille Mathieu entre otros artistas reconocidos a nivel mundial. Grabó "Cri Cri por el mundo" y "Serie Platino".Compuso 210 piezas, de las cuales 207 se conservan y tres están perdidas. Además de 300 personajes derivados de sus composiciones, todo esto propiedad de su hijo Tiburcio Gabilondo, a través de la empresa Gabsol S.A de C.V. Quien es la administradora única de los derechos de autor de la obra completa de Francisco Gabilondo Soler.
En el año 2007 se cumplieron 100 años del nacimiento de Francisco Gabilondo por lo que se le rindieron diversos homenajes a nivel nacional, pero en especial en la Ciudad de México y su ciudad natal, Orizaba.
Del 09 al 20 de octubre de 2007, En el centro cultural Juan Rulfo, de la delegación Benito Juárez de la ciudad de México, se montó una muestra titulada “100 Años 100 Fotos” con 116 fotografías inéditas de las múltiples facetas de Francisco Gabilondo Soler, como padre, marino, astrónomo, boxeador, y las que él tomo como fotógrafo, además de un taller de pintura infantil y conciertos musicales. 13
El 11 de octubre del 2007, el servicio postal mexicano, emitió planillas de estampillas conmemorativas con su imagen, la de “Cri Cri” y algunos de sus personajes de las canciones.14
El 15 de octubre de 2007, se develó un busto, Creación del escultor Humberto Peraza en honor de Francisco Gabilondo Soler, el grillito cantor Cri Cri, en la plaza de los compositores, en que está escrito:
"Nació un 6 de octubre de 1907 y murió un 14 de diciembre de 1990." “Compositor, astrónomo, deportista, marino, hombre de viajes y libros con un espíritu libre, inteligente y honesto”
En este homenaje como parte del centenario de su nacimiento Alex Lora interpretó “Cuando canta el grillo” tema que había compuesto en su honor.
En el parque Naucalli, en Naucalpan de Juárez, Estado de México, en octubre del 2007, se inauguró un monumento homenaje a Francisco Gabilondo, en la que se le muestra tocando un violín y en su hombro el grillito Cri Cri, también tocando su hojita-violín, además existen esculturas de la hormiga y el pescado con bombín bañadas por los chorros de agua de la fuente.